Leo en The World in 2008, el número especial en el que The Economist recoge sus previsiones para el año entrante, un artículo de Graeme Maxton sobre la escasez de personal cualificado que las empresas que operan en China van a sufrir en los próximos meses.
Se trata de un problema acuciante que, según Maxton, muy probablemente se agravará a lo largo de 2008 por la concurrencia de tres factores. En primer lugar, las nuevas inversiones, consecuencia del exceso de liquidez disponible en China. En segundo lugar, el impacto que la política de un solo hijo está teniendo sobre la oferta del mercado de trabajo. En tercer lugar, un descenso de la inmigración procedente del interior, debido a la progresiva industrialización de esa parte del país.
En el caso de los altos ejecutivos el problema es aún más grave. Aunque se están haciendo esfuerzos ingentes, el sistema educativo va muy por detrás de la demanda. La rotación se multiplica y comieza a ser relativamente frecuente que contratar un directivo en China resulte más caro que hacerlo en Europa. En consecuencia, es probable que durante el próximo año asistamos a un incremento en el número de expatriados y que empiece a ser normal que los headhunters nos contacten para ofrecernos un trabajo en Asia. Mientras tanto, en China probablemente veremos como muchos jóvenes profesionales son promocionados antes de tiempo…
Imagen T Chu bajo licencia Creative Commons
Esto también se ve en que cada vez el mercado chino está menos interesado en asumir los «textiles» que aportan poco valor… la ley del péndulo también se ve en las economías cerradas al mercardo libre.