Ayer participé como ponente en el Eats&Twitts Day sobre Talento y RRHH que organizaba en Madrid Antonio Domingo, un genio del networking. Fue una gran experiencia en todos los sentidos: una excelente organización, unos participantes muy «participantes», y el gusto de compartir cartel con ponentes inspiradores como Juan Carlos Barceló, Eva Collado, Alberto Blanco, Andrés Ortega, Alicia Pomares y Dioni Nespral.
El evento comenzó con la intervención de Juan Carlos Barceló que habló sobre tendencias en el campo del reclutamiento 2.0., del riesgo que supone para la competitividad de una empresa no resultar atractiva para los miembros de la generación Y; de cómo organizaciones y candidatos deben ingeniárselas para diferenciarse en un mercado de empleo saturado de información; y de cómo el CV tradicional ha muerto ante el auge de herramientas de «personal branding».
Después le tocó el turno a Eva Collado Durán, que nos explicó el caso de Venca, una empresa de venta de ropa por catálogo que ha evolucionado hacia un modelo de tienda online, y de los desafíos que esa transición supone para la gestión de personas. Nos habló del proceso de implantación de una plataforma de trabajo colaborativo en red, y del cambio cultural que está representando para los miembros de la organización, comenzando por sus líderes y el equipo de Recursos Humanos. Nos contó que algunos de los nuevos perfiles han sido contratados vía Twitter y que las conversaciones de los empleados y su nivel de compromiso son considerados por la dirección como indicadores del éxito de este proceso de transición.
Alberto Blanco, por su parte, habló de cómo el proceso de detección de talento no es propiedad de RR.HH., sino una proceso de management en el que debe estar implicada toda la organización, y que como cualquier proceso de gestión debe de responder a un modelo, incorporar métricas que permitan su control, y ejecutarse en una determinada plataforma tecnológica. Según Alberto descubrir el talento en una organización requiere de análisis de fuentes, evaluación y la elaboración de mapas de talento que permitan visualizar dónde está el talento y su contribución al negocio. También argumentó que, cada vez más, detectar y atraer talento no es tanto una cuestión de “branding” como de comunidad y compartir, especialmente entre las generaciones más jóvenes que ya vienen “cableados” con valores y comportamientos “red”.
Después nos tocó el turno a Alicia Pomares, Andrés Ortega y un servidor. Fue una mesa redonda atípica sobre «organizaciones y liderazgo 2.0». No hubo mesa, aunque sí fue redonda, o mejor dicho en «RED» y «ONDA». Sentados entre los asistentes iniciamos una conversación que poco a poco fuimos extendiendo al resto de participantes en el evento, y que incluso traspasó los límites físicos de la sala donde nos encontrábamos gracias a su difusión vía Twitter. Charlamos sobre las tendencias emergentes en materia de liderazgo y organización del trabajo y de los cambios en el entorno que motivan que cada vez más empresas se planteen la necesidad de evolucionar hacia ese nuevo modelo, a pesar de que muchas otras sigan prisioneras de sus éxitos del pasado. También conversamos sobre el rol que puede desempeñar Recursos Humanos en este proceso, de la necesidad de replantearse su posicionamiento dentro de la organización, y de como la transición a un modelo de organización y liderazgo 2.0 es, ante todo, un proceso de cambio cultural que, si bien puede surgir en cualquier rincón de la organización, precisa de líderes comprometidos que sientan la necesidad de hacer las cosas de forma diferente.
La última ponencia estuvo a cargo de Dioni Nespral. Para Dioni red y talento son los dos componentes de una mezcla que cambiará el mundo que conocemos, aunque hoy solo hayamos experimentado el 5% de ese cambio. De ahí que muchos líderes empresariales no sientan todavía la necesidad de evolucionar. Según él, en el futuro el valor social de una organización será un indicador clave de negocio de cualquier empresa. En su opinión no importará tanto las personas que una empresa tiene en plantilla sino su capacidad de acceder al mejor talento. Habló también del valor de la diversidad, de la importancia de dejar a las personas de la organización tiempo y espacios para perseguir sus propios proyectos, y destacó que las mejores innovaciones muchas veces no vienen de inventos radicalmente novedosos sino de encontrar nuevas formas de conectar realidades que ya existen.
Señalar que durante el Eats & Twitts Day también hubo tiempo para un par de dinámicas de networking y un momento de relax con la actuación de Impro Impar, un grupo de teatro que se definen a ellos mismos como «improvisadores arrepentidos». El evento concluyó con una magnífica comida en el restaurante del Hotel Jardín Metropolitano.
Si queréis más información aquí os dejo la crónica del evento que he elaborado con Storify.
Hola Santi,
Me alegro que te gustara el evento, trabajamos duro para tener una buena visión sobre tendencias en el campo del talento y en ofrecer una buena jornada de networking de calidad.
Encantado de la comida que compartimos juntos, espero volver a verte pronto (¡no sabia que has trabajado en el sector retail!)
Un abrazo.