A partir de un post en el blog de Enrique Dans llego a un artículo de Barbara Kiviat en Time, titulado ‘How Skype is Changing the Job Interview», a propósito de la práctica, cada vez más frecuente, de realizar entrevistas de selección utilizando una webcam.
El uso de este medio puede incrementar la eficiencia de un proceso de selección ya que ahorra tiempo y dinero. Puede beneficiar especialmente a organizaciones globales, donde a veces un mismo candidato debe ser entrevistado por directivos localizados en diferentes lugares del mundo, y también a aquellas que, en el contexto de la tan traída y llevada «guerra por el talento», no se contentan con buscar a los mejores profesionales en su entorno próximo y salen a a la caza de los mejores candidatos del planeta. Aunque las ventajas no son sólo para las empresas. Los candidatos también pueden beneficiarse de la mayor eficiencia de este nuevo canal.
Más rápido, más barato y, además con un alcance global. Encima, una vez salvados los requisitos legales, podemos conservar los videos y verlos las veces que haga falta hasta estar convencidos de que esa es la persona que mejor encaja en la vacante. Sin embargo, una entrevista a través de una webcam también tiene sus menos.
En primer lugar, hay una cuestión de infraestructura. Si entrevistador y candidato no tienen acceso a una red de banda ancha suficientemente rápida la entrevista puede convertirse en un auténtico diálogo de besugos. A este respecto disponer de una buena cámara también ayuda mucho.
Por otro lado, debemos tener en cuenta que, aunque le veamos la cara al candidato, lo que ya supone una ventaja frente a una entrevista telefónica, una entrevista mediante webcam no es lo mismo que una entrevista cara a cara.
El candidato deberá tener esto en mente cuando prepare su «puesta en escena»: qué se ve de fondo, cómo va a vestirse, la distancia a la cámara, el encuadre, la iluminación, incluso valorar -por qué no- la conveniencia de recurrir a la ayuda del maquillaje. Asimismo, tendrá que acordarse de que el contacto visual en una videoconferencia se establece mirando al objetivo de la webcam y no al monitor.
Y lo mismo es aplicable al entrevistador que, especialmente si está realizando la entrevista desde su casa, no debe perder de vista que está representando a su empresa y proyectando su imagen en el mercado de empleo. Y también mucho ojo con «vender motos», que en la red todo queda…
Imagen Donna DesRoches bajo licencia Creative Commons