Datos, datos y más datos. Hoy en día los avances tecnológicos permiten a las empresas medirlo casi todo. El resultado son montañas de información que, más que facilitar la gestión de la organización, muchas veces la entorpecen. Su complejidad y volumen dificultan su análisis, consumen nuestro tiempo, y nos impiden apreciar dónde está lo verdaderamente importante. A veces da la sensación que perdemos de vista para qué queremos toda esa información que capturamos, que no es otra cosa que para tomar mejores decisiones.
Por este motivo me ha llamado la atención Narrative Science, una solución de inteligencia artificial nacida en 2010 y que transforma esos grandes volúmenes de datos en narrativas, historias que utilizan el mismo lenguaje que las personas empleamos para comunicarnos entre nosotros.
Esta solución procesa los datos en bruto que se le proporcionan y detecta cuáles son los elementos importantes, las correlaciones, las tendencias y los puntos de inflexión sobre los que construir una historia. Además, identifica los diferentes ángulos desde los que es posible contemplar unos mismos hechos y puede aplicarles una variedad de estructuras narrativas, pudiendo generar desde un informe detallado a un titular de prensa, pasando por un resumen ejecutivo, o incluso un tuit. También es posible modular el lenguaje utilizado en función del medio y la audiencia a la que se dirige la comunicación.
Esta solución ya está siendo utilizada para producir crónicas de partidos deportivos, análisis sobre la evolución de mercados financieros, informes de gestión para establecimientos de comida rápida, y pienso que no falta mucho para que veamos también aplicaciones en el campo de la gestión del capital humano de las empresas. Por ejemplo, resulta fácil imaginar cómo, aprovechando la mayor cantidad de información disponible sobre nuestra actividad laboral, este tipo de soluciones podrán utilizarse en un futuro no muy lejano para generar resúmenes individualizados que proporcionen de forma periódica a cada una de las personas que trabajan para una organización un feedback objetivo, comprensible y accionable sobre su trabajo, e incluso recomendaciones sobre donde enfocar sus esfuerzos o posibles acciones de desarrollo.
En el siguiente video (en inglés) se explica en detalle la filosofía que hay detrás de Narrative Science. Una iniciativa que pienso que marca tendencia.
Imagen April Killingsworth bajo licencia Creative Commons