En su best-seller «The HR Value Proposition», Dave Ulrich explica que, a menudo, los profesionales del área de RR.HH. y sus stakeholders -accionistas, clientes, directivos y empleados- viven en mundos paralelos. Los directivos de RR.HH. reclaman un hueco en el comité de dirección de sus compañías y un rol activo en la definición de la estrategia de la empresa. Y sin embargo, en su empeño en auspiciar prácticas que ignoran las tendencias tecnológicas, económicas y sociales que marcan la agenda evolutiva de mercados y empresas, parecen olvidarse de que su credibilidad hoy no depende tanto de su calidad de expertos funcionales como del valor que aportan a esos stakeholders.
Este fin de semana, mientras devoraba el reciente libro de Enrique Dans «Todo va a cambiar», pensaba en lo bien que les vendría su lectura a muchos compañeros de profesión. En un tono divulgativo, dirigido al gran público -no es un libro para geeks-, Enrique explica como internet está cambiando el mundo. Unos cambios que los profesionales de los RR.HH. deberíamos preocuparnos de entender y seguir de cerca, por el impacto que tienen y van a tener en modelos de negocio, capacidades profesionales, estructuras organizativas, mercado de empleo, valores, relaciones laborales, flujos de comunicación o procesos de gestión -cosas de las que se supone que tenemos que ocuparnos-.
Muchas de las ideas que se plantean en el libro son realidades con las que antes o después vamos a tener que enfrentarnos en nuestras organizaciones, si es que no lo estamos haciendo ya. Desde como los modelos de negocio se transforman a medida que una atención cada día más dispersa encuentra nuevas maneras de convertirse en actividades generadoras de valor, a las consecuencias que se derivan del carácter extraterritorial de una red universal por naturaleza como es internet, pasando por los cambios que están experimentando los modelos de interacción entre los stakeholders de las empresas en un mundo hiperconectado y transparente, los problemas que provoca la brecha digital tanto en los mercados como en el seno de las organizaciones, o cómo la velocidad del progreso tecnológico está invirtiendo el sentido de la transmisión de conocimiento entre generaciones.
En definitiva, un libro que puede inspirarnos un plan de acción para «subirnos al carro» antes de que sea demasiado tarde. Porque, como concluye Enrique, no podemos quedarnos con el «todo va a cambiar» cuando, en realidad, todo ha cambiado ya.
Imagen Enrique Dans bajo licencia Creative Commons
Hola Santi, me gustó tu análisis, quizás sea un buen regalo para mi padre el nuevo libro de Enrique Dans. Lo pensaré.