A todo el mundo nos gusta trabajar en un entorno de compañerismo. En nuestro país es normal quedar para tomar unas cañas al acabar la jornada e incluso, entre los más jóvenes, hacer planes para el fin de semana. Pasamos muchas horas en nuestro lugar de trabajo. Es normal que según pasa el tiempo vayamos cogiendo confianza, la frontera entre vida profesional y vida privada se difumine, y acabemos compartiendo confidencias con nuestros colegas.
Sin embargo, desde su tribuna en HR World, Brain Satterfield opina que hay varias cosas que, por muy grande que sea la confianza, deberíamos procurar mantener en secreto:
- Lo bien que te fue la entrevista de trabajo que hiciste ayer.
- Que estas saliendo con un@ compañer@.
- Aquel fin de semana tan loco.
- Que llamaste diciendo que estabas enfermo, pero en realidad estuviste en la playa.
- Tu costumbre de «coger prestado» material de la oficina.
- Comentarios negativos sobre tu jefe o compañeros.
- Un pasado criminal.
- Que estás preparando una conspiración contra tu jefe.
Pueden parecer obviedades, pero no lo son. Más de uno se ha jugado su carrera en una de esas.
Imagen Salvatore Barbera bajo licencia Creative Commons