Me sorprende lo que leo en Execunet. Según un estudio realizado por esta red de reclutamiento directivo, el tiempo que un ejecutivo tarda en encontrar un nuevo trabajo en Estados Unidos se ha acortado significativamente y ahora se sitúa, en promedio, en 10 meses frente a 13 meses en 2004 (Hasta ahora la norma era emplear, como mínimo, un mes de búsqueda por cada 10.000 USD de salario que se pretende ganar).
Me choca, porque mi experiencia me dice que en nuestro país la tendencia es la inversa. Lo que veo es que las empresas cada día son más rigurosas en materia de reclutamiento, analizan con calma sus necesidades y no se conforman con el primer candidato que pasa por delante de su puerta, hasta el punto de que son capaces de aguantar muchos meses una vacante antes que incorporar un perfil que no es el adecuado. Nada de «aquí te pillo aquí te mato».
Por su parte, los candidatos se han vuelto más exigentes, y se preocupan más de cómo encaja cada nueva experiencia en su carrera profesional y qué valor puede aportar a su curriculum. Sus movimientos están más estudiados, son más racionales, se lo piensan más…
Es verdad que los avances tecnológicos han contribuido mucho -y más que lo harán- a facilitar el encuentro entre oferta y demanda de trabajo, pero, por el momento, lo que veo en el mercado, al menos en nuestro país, es que los «cortejos» se están volviendo más largos y se tarda más tiempo en «consumar»…
Imagen Herr Olsen bajo licencia Creative Commons
Qué barbaridad. Me parece increíble. ¿qué hacen durante esos 10 meses, de qué viven?
¿Cuánto tarda en España en conseguir un empleo un ejecutivo, y un mando intermedio?